EL TESTIGO

       Caminando por calles estrechas de una gran ciudad , vas contando los pasos que a cualquier parte te llevarán, en el momento oportuno al levantar la mirada furtiva del suelo, intuyes una ventana sin rejas, abierta de par en par con las cortinas corridas,con asombro y curiosidad no apartas los ojos, es más, te inclinas hacia delante como si entraras en zona prohibida, asaltando la intimidad de alguien que sin embargo subliminalmente te invita a pasar.La visión es limitada , el cosquilleo en el estómago te convierte en valiente asomandote más...un poco más...de puntillas podrás...Una canción de fondo como si de una gramola se tratase hace presagiar un descubrimiento interesante.El corazón se acelera al escuchar unos tacones de señora acercarse...mientras un embriagador aroma a rosas inunda la sala en penumbra.Una lamparilla encendida alumbra un libro abierto , pareciese de cubiertas doradas y filigranas antiguas, se adivina un idioma distinto, no reconcido pero que asombrosamente se lee descubriendo cada coma, cada exclamación y cada palabra al instante.Forzando todos aquellos músculos y huesos hacia delante como si de muelles se trataran para así poder traducir y leer más de cerca la narrativa, empieza a comprender su lectura que sorprendentemente es la misma acción y la misma interpretación que se sucede en ese instante....

     

       Caminando por calles estrechas de una gran ciudad, vas contando los pasos que a cualquier parte te llevarán...